Esta cirugía es actualmente el único procedimiento eficaz y seguro para el aumento de mamas. En un principio la paciente y el cirujano se reúnen para una primera evaluación en la que se conocen las expectativas de la paciente y cuáles son las alternativas para conseguir los mejores resultados.
Una vez superada esta etapa se deben elegir el tipo de implantes que pueden ser redondos o anatómicos, estos últimos permiten un resultado más natural. El tamaño dependerá también del tipo de cuerpo de la paciente y de los resultados que se desean obtener. Se puede escoger entre implantes lisos o texturizados con cobertura se silicona, o los que se rellenan con hidrogel. Los implantes actuales cuentan con una duración mucho mayor a los que se utilizaban años atrás, con un período de vida estimado en 20 años o más antes de que se presente la necesidad de una sustitución del implante.
Dependiendo del tipo de mama y de las consideraciones del cirujano, el implante de senos se puede realizar por delante o por detrás del músculo de la mama. Sólo un especialista puede determinar este tipo de detalles para ofrecer la mejor recuperación y los resultados más satisfactorios para la paciente.